Según el Dr. Miguel Ellena Dellinger, de INIA-Carillanca, la fertilización es la base para un adecuado desarrollo de los árboles de avellano europeo en su fase de formación y su etapa productiva.

El especialista asegura que el crecimiento y el rendimiento dependen de la disponibilidad de nutrientes en el suelo. Así, una adecuada fertilización de los avellanos debe considerar el tipo de suelo, la disponibilidad de nutrientes, la condición climática y los requerimientos nutritivos de los árboles.

De esta manera, aconseja que en la fertilización es importante tener en cuenta ciertos puntos como satisfacer los requerimientos nutricionales, mantener un adecuado equilibrio entre la actividad vegetativa y productiva, disminuir al máximo el costo de las aplicaciones, reducir las pérdidas por lixiviación, el impacto ambiental y los costos.

Antes de plantar, Ellena sugiere realizar un análisis físico y químico del suelo. Para esto asegura que se necesitan construir calicatas para determinar la profundidad del suelo y presencia de limitantes como napas freáticas superficiales, capas impermeables y moteados. Estos influyen en la compactación del suelo y aireación, entre otros factores, incidiendo en la respuesta a la aplicación de fertilizantes y con ello, sobre el desarrollo radicular y por consiguiente en la parte aérea del árbol.

El análisis químico del suelo juega un papel sumamente importante, porque es útil para evaluar la fertilidad de un suelo. Con los resultados que se obtengan de este proceso, según las palabras del especialista de INIA, se establece la fórmula de fertilización, las dosis de nutriente a aplicar y además, se corrigen eventuales problemas de acidez para cada condición de suelo en particular.

Ellena afirma que, para obtener buenos rendimientos y calidad es necesario mantener un adecuado equilibrio de los nutrientes en el suelo. Entre las consecuencias del desequilibrio del nivel en que se encuentran los nutrientes en el suelo están las deficiencias, toxicidades o interferencia de un nutriente con la absorción de los otros.  Por ejemplo, en el sur de Chile es importante la corrección del ph y toxicidad por aluminio en suelos ácidos. En este caso sugiere que el proceso se planifique cuidadosamente para cada caso en particular.

Fuente: Red Agrícola