La crisis de la moneda turca afecta a una cadena de suministro local, incluida Nutella

Los productores de avellanas de Turquía, que concentran el 70% de la producción mundial, afirman que las políticas del mandatario Recep Tayyip Erdogan están disminuyendo la producción e incrementando los costos.

Los productores turcos, que producen la mayor cantidad de avellanas a nivel global, se encuentran actualmente enfrentando una crisis monetaria que ha provocado una caída de suministro, la cual se extiende desde la ciudad de Giresun hasta la firma gigante de crema de avellanas; Nutella.

La industria de este frutal en dicho país, emplea a aproximadamente cuatro millones de personas, quienes se encargan de producir el 70% de las avellanas de todo el mundo.

El presidente turco Recep Tayyip Erdogan señala que quiere una lira nacional más débil, expandir la industria manufacturera y fomentar las exportaciones. Frente a sus medidas, la lira ha perdido la mitad de su valor desde comienzos de año.

Dicha caída está aumentando el costo de las semillas, los fertilizantes, los pesticidas y otros productos básicos importados. Al mismo tiempo, las fábricas de avellanas están pagando más por la energía, el transporte y el embalaje. Así, los costos laborales relacionados a este fruto crecerán, debido a que el Gobierno está ad portas de aumentar el salario mínimo para mantenerse al día con una tasa de inflación del 21%.

De esta manera, los antiguos productores de avellanas de Turquía se están volviendo más pobres y sus granjas producen una menor cantidad de dichos frutales. Según los líderes de la industria, la reducción de los suministros eventualmente va a incrementar los precios para los consumidores.

«El mundo está al borde de la escasez de nueces (…) Si eres fanático de Nutella, será mejor que lo guardes en tu próxima compra», indicó Turgan Zülfikar, consultor de Nueva York para empresas turcas que ingresan al mercado americano.

Por su parte, Ferrero, la compañía italiana que produce la famosa Nutella, compra cerca de un tercio de las exportaciones de Turquía. Sin embargo, declinó las solicitudes de comentarios para referirse a la situación y cómo esta afectará a su negocio.

Turquía se sumergió en una grave crisis monetaria en noviembre, luego de que el país recortara las tasas de interés a instancias de Erdogan, quien decidió despedir a casi todos los demás altos mandos de su Gobierno que obstaculizaron esta estrategia económica, además de a varios ejecutivos del banco central. Frente a ello, la lira perdió cerca del 30% de su valor solamente en noviembre.

La crisis de profundizó el lunes 13, cuando la lira perdió más del 6% de su valor en un par de horas mientras se llevaba a cabo la liquidación de inversores generada a raíz de los comentarios de Erdogan, quien exigió más recortes de las tasas de interés. Desde principios de diciembre, el banco central ha estado vendiendo miles de millones en moneda extranjera, intentando estabilizar la lira.

La agitación e incertidumbre que se vive hoy en torno a la economía turca, ha provocado daños en la industria de la avellana del país. Las decenas de miles de pequeños agricultores que cultivan la mayoría de estos frutos se encuentran luchando con costos de producción más altos.

Según una asociación de productores, el precio de los fertilizantes casi se ha triplicado del equivalente a 215 dólares la tonelada en 2020 a 650 dólares la tonelada este año, lo que implica que se vuelva muy caro para una gran parte de los agricultores.

Fuente: Milano Finanza.