Cultivos híbridos: El futuro de las avellanas

Estos cultivos logran combinar las principales características que poseen las especies fusionadas.

En el Medio Oeste Superior se está desarrollando una alternativa para el cultivo de avellanas. Se trata de cultivos híbridos, los cuales, según Jason Fischbach, especialista en cultivos leñosos de la Extensión de la Universidad de Wisconsin, Estados Unidos, son el futuro de este fruto en aquel territorio.

Al respecto, Fischbach también asegura que «los propagadores han luchado mucho para hacer copias clonales de híbridos (…) La colocación de capas de taburetes funciona, pero es lenta. Nadie ha descubierto todavía el cultivo de tejidos con los híbridos y, por lo tanto, aún no tenemos plantas disponibles para los productores «.

El experto codirige la Iniciativa de Desarrollo de la Avellana del Medio Oeste Superior (UMHDI), una colaboración que surge entre las universidades de Minnesota y Wisconsin, la cual tiene como fin investigar y promover el uso de cultivos híbridos. De hecho, crearon una página web donde venden las combinaciones para plantar.

“Si es un nuevo cultivador y nunca ha cultivado avellanas antes, le recomiendo que compre plántulas y las establezca para adquirir experiencia, de modo que no se equivoque más adelante. Eso será muy importante, ya que luego ingresará en las listas de espera y tendrá acceso a estos cultivares (híbridos)», afirma Fischbach.

Las plántulas y los cultivares híbridos corresponden a dos de las cuatro especies de material vegetal entre las que deben escoger los productores de avellanas de Estados Unidos. Los otros dos tipos son las plántulas estadounidenses y los cultivos europeos, los cuales, de acuerdo con el científico, «no son realmente opciones para nosotros en el Medio Oeste Superior».

El Medio Oeste Superior es abarcado por cerca de 130 productores de avellanas, según el UMHDI. Lo anterior, corresponde a casi 135 acres de producción en Iowa, Wisconsin y Minnesota.

El especialista asegura que los cultivos híbridos de avellana son el objetivo principal, debido a que estos logran rescatar y fusionar las principales características de las distintas especies combinadas.

Por ejemplo, según Fischbach, los híbridos entre Corylus americana y C. avellana combinan la dureza invernal y la resistencia al tizón de la primera,  con los mayores rendimientos de grandes y las cáscaras más delgadas de la segunda.

Además del UMHDI, existen varios programas de mejoramiento que están comprometidos con el desarrollo de los cultivos en cuestión. En UMHDI están probando diferentes selecciones de primera generación, entre las que se encuentran «Eric 4-21», «Rose 9-2» y «Minar 342». 

Por su parte, en el Grimo Nut Nursery en Niagara-on-the-Lake de Ontario, han logrado producir otra importante variedad de selecciones, como «Northern Blais», «Dawn» y «Marion».

“Por lo que hemos visto hasta ahora, a ‘Northern Blais’ y ‘Marion’ en el sur de Wisconsin les está yendo bien. En el norte de Wisconsin y en el norte de Minnesota, no se han desempeñado tan bien y es posible que no sean lo suficientemente resistentes al invierno, pero no vamos a sacar conclusiones firmes al respecto durante un par de años más «, explicó el especialista.

Uno de los nueve proveedores de plántulas híbridas del UMHDI es Forest Agriculture Enterprises, empresa que en un principio abasteció de plántulas a la entidad en 2011. Desde entonces, se han llevado a cabo documentaciones y pruebas, las que cuales han permitido dar a conocer cuáles son las limitaciones que poseen las plántulas actualmente, en cuanto a apoyo a la producción comercial.

Fuente: Growing Produce.